El partido político Nueva Alianza pierde su registro en Edomex
Aunque perdió su registro, Nueva Alianza gobernará Texcalyacac y Almoloya del Río hasta 2025.
El Partido Nueva Alianza en el Estado de México (NAEM) ha perdido su registro como partido político estatal. Luego de no alcanzar el 3% mínimo de votos requerido en las elecciones locales de 2024.
La decisión fue aprobada el 28 de octubre por el Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM). En una sesión extraordinaria donde la medida obtuvo unanimidad entre los consejeros presentes.
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La consejera Karina Ivonne Vaquera Montoya solicitó ser excusada de la votación. Mientras que los demás partidos, incluidos PAN, PRI, PVEM y Morena, estuvieron representados en la sesión.
Acciones de Nueva Alianza en defensa de su registro
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A lo largo del año, Nueva Alianza intentó revertir esta resolución mediante acciones legales. En agosto, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmó la pérdida del registro. Rechazando la petición del partido para reconsiderar el porcentaje alcanzado en la votación para los ayuntamientos, donde obtuvo un 3.4%.
Sin embargo, el IEEM determinó que este criterio no era suficiente para conservar su registro estatal.
El proceso de liquidación del partido ya ha comenzado. Con Elías Velázquez Colín designado por el IEEM como interventor. Para supervisar el manejo de recursos, bienes y obligaciones de Nueva Alianza en el Estado de México.
Durante este proceso, el partido podrá destinar fondos únicamente para nóminas e impuestos, bajo estricta supervisión. Mientras que sus bienes muebles e inmuebles no podrán ser vendidos, gravados ni donados.
Panorama político local
A pesar de la pérdida de su registro, Nueva Alianza gobernará los municipios de Texcalyacac y Almoloya del Río hasta el 2025. Sin embargo, ya no podrá participar en futuras elecciones como partido. Limitando su capacidad de postulación a nuevos cargos y reduciendo el número de actores en el espectro político mexiquense.
La pérdida de registro de Nueva Alianza marca el fin de su representación formal en el Estado de México. Dejando un entorno dominado por las fuerzas políticas tradicionales.
Aunque aún conservará una limitada presencia en el ámbito municipal, el partido deberá cumplir estrictamente con el proceso de liquidación bajo la vigilancia del IEEM.