La gobernadora del Estado de México anunció la activación del Plan DN-III, bajo la supervisión del Ejército Mexicano, en respuesta a las intensas lluvias que han golpeado cinco municipios clave en la región. Hueypoxtla, Chalco, Cuautitlán Izcalli, Cuautitlán, y Chimalhuacán han sido especialmente afectados, poniendo en riesgo tanto el patrimonio como la integridad de los residentes locales.
En un esfuerzo conjunto entre los tres niveles de gobierno, aproximadamente 900 elementos están desplegados en el área para proporcionar asistencia directa a la población afectada.
La mandataria estatal, en un recorrido por la zona oriente del estado, supervisó personalmente las operaciones destinadas a ofrecer ayuda inmediata y cercana a las comunidades afectadas.
Brigadas de Atención
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Además del despliegue militar, se han establecido Brigadas de Atención que incluyen servicios médicos, actividades de saneamiento y monitoreo continuo para prevenir posibles emergencias adicionales. En Chalco, por ejemplo, se han movilizado 50 soldados de la Sedena y 150 policías estatales para realizar labores de limpieza y proporcionar apoyo directo a las familias en áreas como San Martín, Pueblo Nuevo y Los Héroes I.
La respuesta también incluye medidas de salud pública, con la entrega de suministros esenciales como escobas, palas y material de limpieza, así como la administración de vacunas preventivas y medicamentos básicos para garantizar la salud de los afectados.
Entre los artículos distribuidos se encuentran miconazol en crema, Vida Suero Oral, albendazol, metronidazol, cubrebocas y gel antibacterial, entre otros.
Este despliegue integral busca mitigar los efectos de las inundaciones y asegurar el bienestar de aquellos más vulnerables ante los desastres naturales, reflejando una coordinación efectiva entre los diferentes niveles de gobierno y las fuerzas armadas para proteger a la población mexiquense en momentos de crisis.