Cada 7 de junio se celebra en México el Día de la Libertad de Expresión, una fecha que rinde homenaje al derecho de toda persona a manifestar sus ideas, opiniones e información sin temor a represalias. Esta conmemoración fue establecida en 1951 como un reconocimiento a la importancia de una prensa libre en el fortalecimiento de la vida democrática del país.
Este derecho está respaldado por la Constitución Mexicana, especialmente en los artículos 6 y 7, así como por convenios internacionales como la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La libertad de expresión no solo protege el acto individual de comunicar, sino que también garantiza el acceso a la información por parte de la sociedad, impulsando así una ciudadanía crítica y participativa.
La expresión libre de ideas tiene una doble función: permite a los individuos expresar lo que piensan, y al mismo tiempo, asegura que la sociedad pueda recibir información diversa, formando un entorno de debate abierto y plural. Sin este derecho, la transparencia y la rendición de cuentas serían imposibles.
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En el México actual, esta fecha también invita a reflexionar sobre los desafíos que enfrenta el periodismo: agresiones, censura, amenazas y restricciones que limitan el libre ejercicio de informar. Defender la libertad de expresión es, por tanto, una forma de proteger la democracia misma.
Al recordar esta fecha, se reconoce la labor de periodistas, medios de comunicación y ciudadanos que, con responsabilidad y valentía, sostienen la voz crítica de la sociedad. Fomentar una cultura de respeto hacia la libertad de expresión fortalece los valores democráticos y construye un país más justo e informado.
